miércoles, 26 de agosto de 2009

Respirar limpio

Tú qué piensas: Respirar limpio en las calles, en los bares y restaurantes, en los sitios públicos en general ¿es un derecho o un capricho?

domingo, 9 de agosto de 2009

Besos

Besos no. Apretón de manos, no. ¡Hola!

El Colegio de Médicos de Madrid colgó un cartel de 30 metros con el slogan: "No beses, no des la mano, di hola". Recomendación para evitar el contagio del virus de la gripe A. El mejor método para evitar el contagio de este virus es no tocar a los demás, dice su presidenta, Juliana Fariña. Prevención, olé.

Fariña aseguró que deberíamos fijarnos en el saludo japonés, que se hace inclinando la cabeza, ya que los españoles, "afortunada o desafortunadamente", somos muy propensos "a tocarnos y besarnos, incluso con las personas apenas conocidas, y a acudir a aglomeraciones". ¿De dónde hemos importado esta moda? Me ha gustado la idea, que serviría para cambiar ciertos hábitos en las relaciones humanas.

Para Fariña, lavarse continuamente las manos, que es una de las principales medidas higiénicas contra la gripe A recomendadas por las autoridades sanitarias, es "más difícil de cumplir" que el simplemente saludarse diciendo hola.

“En Japón lo que mas llamará nuestra atención es el poco contacto físico que hay entre la gente. Nosotros estamos acostumbrados a saludarnos con un beso, un abrazo o un apretón de manos vigoroso. Los japoneses no hacen esto y se limitan a inclinarse un poco para saludar. Nada más. Si pretendemos acercarnos con la mejilla presta al beso o extendemos la mano enseguida notaremos que el japonés recula al sentirse invadido su espacio íntimo”, leo en la prensa.

Por eso, es importante recordar que allí la gente se saluda entre sí inclinándose un poco. Apenas un ligero movimiento de cabeza cuando estamos entre conocidos y una reverencia mucho más lenta y pronunciada si nos presentan a alguien más anciano o una personalidad importante.

Esa invasión del espacio personal forma parte de la vulgaridad y chabacanería que impera en las relaciones personales en España. No se respeta el descanso nocturno, interrumpido por el vocerío de juerguistas; no se respetan los edificios, con las fachadas invadidas de graffitis. Tampoco se respeta el espacio personal. Cualquiera parece tener derecho a marcar la piel de tu cara con un beso, o un par de besos. O te agarran la mano y la sacuden con fuerza, como si fuera suya. O te dan el abrazo del oso, con fuerte y sonoras palmadas en los omóplatos.

Por eso esta idea surgida como prevención de la gripe A me parece una excelente oportunidad para reflexionar. Saludo japonés, sí.

He tenido que dar besos a compañeros y compañeras superacatarrados/as, supertosedores/as, supertabaqueados/as, supervinateados/as. He tenido que repartir ósculos a mansalva al despedirme para iniciar unas cortas vacaciones, o al regresar después de una semana de ausencia. He tenido que poner la cara para que alguien estampara un ósculo cuando se acercaban a saludarme, en una presentación laboral. Posiblemente no les vuelva a ver en el resto de mis días.

No suelo ser maniático de la higiene, pero me gusta la limpieza. No soy hipoconcríaco, pero me gusta la prevención. He tenido que soportar durante muchas mañanas a compañeras y compañeros que me han puesto casi dolor de cabeza por sus golpes de tos. Las mismas y los mismos que mientras tosían, me ofrecían con sus manos alguna galleta o un trozo de bizcocho, o cualquier cosa para engullir desde las diez de la mañana.

A partir de ahora, un alegre ¡hola!, y que nadie se ofenda. Por fin me van a respetar mi espacio corporal. Yo soy el que elijo, y los besos, para mi familia, mi entorno más íntimo. Así pienso yo y así lo deseo.

El que quiera, puede besar también a su gato, pero con cuidado. Puede besar a su caballo, a su perro, o a ese puñado de euros que le ha tocado en la lotería. Pero ¿besarme a mí? ¿Besar yo a quien no quiero besar? Conmigo no cuenten.

Para finalizar, qué mejor una canción de Ana Belén, cuya letra copio a continuación. Se la dedico a mi mujer, pero sin las copas de vino. No las necesito al comenzar la noche…

El reloj de cuerda suspendido,
El teléfono desconectado,
En una mesa dos copas de vino,
Y a la noche se le fue la mano.

Una luz rosada imaginamos
Comenzamos por probar el vino
Con mirarnos todo lo dijimos
Y a la noche se le fue la mano.

Si supiera contar todo lo que senti,
No quedó un lugar que no anduviera en ti.

Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Que no acabe esta noche, ni esta luna de abril,
Para entrar en el cielo, no es preciso morir...

Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura...

Pareciamos dos irracionales, que se iban a morir mañana...
Derrochamos,no importaba nada, las reservas de los manantiales
Pareciamos dos irracionales, que se iban a morir mañana...

Si pudiera contar todo lo que senti,
no quedó un lugar que no anduviera en ti.

Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Que no acabe esta noche, ni esta luna de abril,
para entrar en el cielo, no es preciso morir...

Besos, ternura, y la noche es testigo de esta inmensa locura
Besos, ternura, nuestra ruta de amor se convierte en ternura

Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Besos, ternura, y la noche es testigo de esta inmensa locura
Besos, ternura, nuestra ruta de amor se convierte en ternura...

Que derroche de amor, cuanta locura
Besos, ternura, que derroche de amor, cuanta locura
Besos!